El pasado 10 de diciembre de 2019, la Cámara de Representantes de Uruguay aprobó la Ley de Economía Social Solidaria en Uruguay, un paso más que importante en un largo camino. Hablamos con Helena Almirati, integrante de la Coordinadora de Economía Solidaria Uruguay, que ha formado parte de todo el proceso junto con el resto del ámbito de la Economía Social Solidaria (ESS) del país, para que nos explique la importancia de la aprobación de esta política pública.

Escrito por Gabriel Boichat, responsable de comunicación de RIPESS

Has sido parte de las negociaciones para el desarrollo y aprobación de la ley a través de la Coordinadora de Economía Solidaria. ¿Cómo ha sido el proceso? ¿Cuál ha sido el liderazgo emprendido por el ámbito de la ESS?

Actualmente, es parte cotidiana de la Coordinadora de Economía Solidaria Uruguay su participación en la construcción de proyectos de ley y propuestas hacia las políticas públicas. Ello es consecuencia de la definición de que ésta sería una de las líneas estratégicas de su trabajo y un largo trayecto recorrido que tiene como un hito fundamental el trabajo hacia la construcción de la Ley de Economía Social y Solidaria.

En el año 2008, se aprobó la ley general del Cooperativismo y se crea INACOOP, el Instituto Nacional de Cooperativismo. Éste es un primer antecedente en Uruguay, ya que estuvo en debate el incluir en este proceso a la economía solidaria.

A partir del 2011 se promueve desde la Coordinadora un debate que se llamó: «Hacia una ley de economía solidaria» en donde se realizaron encuentros, debates, mesas redondas, en cada evento que se realizaba a nivel nacional y dos actividades convocadas en el parlamento.

En los primeros encuentros que convocamos sobre legislación surgía la duda: ¿Es necesario una ley específica de ESS? ¿No será mejor primero desarrollar la economía solidaria y fortalecer sus organizaciones?

Vivimos en un mundo donde prima la economía que pone en el centro la acumulación de capital y no el desarrollo humano, ni el cuidado del medio ambiente, y donde hay políticas públicas, legislación, programas educativos construidos a través de toda la historia del país que buscan fortalecer y desarrollar este sistema y sus valores. Por ello, el desarrollo de la economía solidaria, la legislación y las políticas públicas que la favorezcan, merecen toda nuestra atención y esfuerzo.

Paralelamente a colocar el tema en debate a través de encuentros de trabajo en cada actividad que realizamos, comenzamos a realizar encuentros con otras organizaciones sociales, instituciones públicas y parlamentarios, lo cual aportó al relacionamiento entre estos actores, así como a la visibilidad de la ES.

Este proceso culmina con la creación, en el año 2013, del primer proyecto de ley de ESS en una comisión que integró la Red de economía solidaria de la Universidad, INACOOP, la Coordinadora de Economía Solidaria y representantes ministeriales.

En el año 2017, después de un largo proceso de intercambio entre las organizaciones de la ESS y públicos, ingresó a estudio el primer proyecto de ley parlamento.

¿Cuáles son los principales puntos de la Ley y qué cambios va a suponer para el ámbito de la ESS en Uruguay?

Del resumen de este proceso destacamos algunos elementos que fueron recogidos en la ley:

Que se debe promover la articulación entre todos los actores de la ES y una formulación que involucre a todos. En este proceso definimos que una economía que necesita tanto desarrollo está bien que sea doblemente adjetivada: Economía Social Solidaria

Que la elaboración de las políticas públicas y legislación en ES debe tomar en cuenta en su construcción, no solo la realidad de este sector, sino al aporte de sus organizaciones.

Que se debe pensar en nuevas herramientas de desarrollo y de evaluación. ¿Cómo fomentar, evaluar y medir una economía que no se mide solo por el Producto Interior Bruto (PIB) que genera, el balance financiero anual, la cantidad de trabajadores o el poder adquisitivo de éstos?

Que se debe incluir la ESS y sus valores en la educación a lo largo de todo el proceso educativo.

Que se deben elaborar políticas públicas nacionales que se desarrollan de igual forma en todos los territorios.

Por otra parte, la ley define el objeto y la definición de la ESS, en su artículo 3°:

“Se entiende por Economía Social y Solidaria al sistema económico, cultural ambiental, conformado por el conjunto organizaciones y redes que desarrollan fines colectivos o sociales, caracterizado por las prácticas solidarias, asociativas, cooperativas y de ayuda mutua, la participación democrática en la toma de decisiones, la autonomía de la gestión, la primacía del ser humano y del bien común sobre el capital, la equidad social y de género, el respeto a la naturaleza, la diversidad cultural y el desarrollo local, con el objetivo de satisfacer las necesidades de sus integrantes o de la comunidad en procura del desarrollo humano y la democratización de la economía a partir de la producción de bienes y servicios, su distribución, circulación, comercialización, financiamiento y consumo justo y responsable”.

Finalmente, creo importante destacar que la ley prevé la creación de un Consejo Nacional de ESS, integrado por las organizaciones sociales y todas las áreas estatales que interactúan con este sector, así como la convocatoria a una de las Conferencias Nacionales anual, espacio de participación, articulación y elaboración con participación de todos los actores públicos y de las organizaciones sociales.

La Coordinadora forma parte de la red RIPESS LAC. ¿Habéis podido contar con el apoyo y ejemplos de otros países a través de la intercooperación con la red? ¿Qué supone esta ley para el resto de países de LAC?

Al comienzo de este proceso se realizó un estudio y se difundieron algunos antecedentes de legislación de ES en otros países, que por distintas razones aportaban elementos a esta construcción. Por ejemplo, tuvimos en cuenta el Proyecto de ley de ES de Brasil, la Ley de la Economía Popular y Solidaria de Ecuador, el Proyecto de ley del sector de la ES de la República Dominicana o la ley de la Superintendencia de la ES de Colombia.

Gracias a nuestra pertenencia a la red, participamos en encuentros de intercambio internacional sobre legislación y políticas públicas. Y, por último, la reciente creación de la comisión de incidencia de RIPESS-LAC, la cual integramos, cumplirá sin duda un rol importante en el intercambio y construcción colectiva.

A partir de ahora, ¿cuáles son los principales retos que se presentan?

Éste fue un largo camino, con encuentros y síntesis, pero también con dificultades y tensiones, que merecen todo nuestra atención y profundización, algunas entre las formas antagónicas de concebir la economía y la vida, y otras entre las distintas organizaciones de la ESS.

Los retos que tenemos por delante, es continuar trabajando, siempre, en la búsqueda de encuentro y articulación entre todos los integrantes de la ESS, así como aportar a que la ley aprobada incida en la construcción de la ESS.

Tenemos esta semana dos eventos de visibilidad y evaluación de la ley, uno en la Universidad convocado por el Grupo de investigación en políticas públicas y ES de la universidad con apoyo de la Coordinadora de Economía solidaria. Y otro en el marco de un encuentro de Economía solidaria convocado por la Coordinadora.

La aprobación de la ley aportará al desarrollo de la ESS si la vemos cómo un gran paso, de un largo camino, hacia el otro mundo posible.

Fue el mejor texto que logramos colectivamente escribir, que marcará el camino si continuamos trabajando día a día para que cada letra, cada capítulo no sean solo eso.