Las redes de base de la ESS y sus miembros en todos los continentes están desempeñando un papel clave en la superación de los retos de la Covid19 y demostrando su resistencia y capacidad de innovación. El reto al que nos enfrentamos ahora no es cómo reconstruir las estructuras socioeconómicas anteriores a Covid, sino cómo construir un modelo alternativo de desarrollo, impulsado por las necesidades de todos los pueblos y comunidades del mundo, y la protección de nuestro planeta.

Ahora se abre la oportunidad de acelerar el proceso, aprovechar las miles de soluciones ingeniosas que se están creando en las comunidades, y hacer que el cambio positivo sea permanente y global en toda su diversidad, basado en los derechos humanos y la justicia social, medioambiental y económica.

Al mismo tiempo, debemos desarrollar y fortalecer los ecosistemas de la ESS a todos los niveles, partiendo de lo que ya existe.

 

Para ello, la red intercontinental RIPESS está avanzando. Hemos adoptado una nueva forma de coordinación internacional más sólida y un plan estratégico para el periodo 2021-2023. Este plan tiene en cuenta tanto el contexto como las prioridades, necesidades y visiones de las diferentes redes continentales y sectoriales miembros de la ESS.

Las dos principales orientaciones estratégicas que se han adoptado y en torno a las cuales se implementará la nueva estrategia, se centran en aspectos que añadirán valor al trabajo de nuestras redes miembro, asegurando además impactos transformadores en el ámbito regional y global. Estas dos prioridades son las siguientes

– Fortalecer nuestro trabajo de incidencia internacional desde el nivel local hasta el global para asegurar una mayor visibilidad de las soluciones aportadas por las iniciativas y redes de la ESS, y así lograr impactos más transformadores.

– Apoyar el fortalecimiento del trabajo de nuestras redes subregionales de ESS en sus actividades de incidencia subregional, y su trabajo con los miembros de sus redes nacionales y locales de ESS.

Más concretamente, esto significa que

– La RIPESS desempeñará un papel mayor y más sistemático en la promoción de la ESS en diferentes plataformas y escenarios internacionales en los que participan muchos actores clave, como los Estados, las agencias de la ONU, las universidades, las redes y plataformas internacionales y otros movimientos sociales. Estas plataformas pueden ser temáticas (medio ambiente, ODS, desarrollo local…), sectoriales (soberanía alimentaria, protección social, finanzas éticas…), y/o centradas en determinados grupos (jóvenes, mujeres, migrantes, trabajadores informales, pueblos indígenas…).

– También significa apoyar y promover el trabajo subregional y continental de defensa de la ESS, ya que cada subregión tiene sus propias especificidades y diversidad, así como actores clave a los que dirigirse en relación con los desafíos temáticos, sectoriales y de grupos específicos.

– Paralelamente, a nivel local, es esencial apoyar la promoción de la ESS hacia los gobiernos locales, reforzando el apoyo de las redes continentales de ESS hacia sus miembros nacionales. Al mismo tiempo, potenciar el intercambio de herramientas y estrategias de incidencia entre los distintos países de los diferentes continentes, en un espíritu de construcción conjunta de políticas públicas y programas de ESS entre los actores de la ESS y los gobiernos locales.

– Además, asegurarnos de desarrollar más alianzas con otras economías transformadoras y movimientos de la sociedad civil, así como con cualquier otra plataforma de múltiples actores con visión transformadora, con el fin de unir fuerzas y obtener más impacto en nuestras acciones de incidencia.

– Y por último, asegurar que damos visibilidad al trabajo de base de la ESS en todo el mundo, así como a las acciones de las redes nacionales de ESS; y permitir los intercambios de experiencias y herramientas entre los actores de la ESS y entre las redes, para contribuir a reforzar y difundir estas prácticas e innovaciones, incluso de grupos específicos (mujeres, jóvenes, sector informal, pueblos indígenas, etc.).

Esta estrategia del nuevo período es ambiciosa, con capacidades limitadas y debilitadas por la propia crisis actual. Pero creemos que todas estas acciones deben llevarse a cabo en paralelo, y deben reforzarse progresivamente, teniendo en cuenta la necesidad urgente de una transformación sistémica real y profunda. Estamos convencidos de que la ESS y las economías transformadoras relacionadas ofrecen soluciones que deben ser consideradas, potenciadas y apoyadas con urgencia.